El Codex Alimentarius aprueba más de 30 reglas que deberán cumplir todos los países para reducir el riesgo en el consumo alimentos
Algunos de los principales problemas relacionados con la inocuidad en el consumo tienen que ver, según han concluido los expertos del Codex Alimentarius, con la "propagación de los riesgos microbiológicos" (Salmonella o Escherichia coli), los contaminantes químicos y el desarrollo de nuevos alimentos modificados genéticamente. De ahí la importancia de establecer las herramientas necesarias para que los países puedan acomodarse a las condiciones que garantizan la inocuidad de la cadena alimentaria.
Algunos de los principales problemas relacionados con la inocuidad en el consumo tienen que ver, según han concluido los expertos del Codex Alimentarius, con la "propagación de los riesgos microbiológicos" (Salmonella o Escherichia coli), los contaminantes químicos y el desarrollo de nuevos alimentos modificados genéticamente. De ahí la importancia de establecer las herramientas necesarias para que los países puedan acomodarse a las condiciones que garantizan la inocuidad de la cadena alimentaria.
Uno de los temas abordados por el Codex Alimentarius ha sido la presencia de "Listeria monocytogenes" en comidas listas para consumir. En la evaluación realizada por los expertos, ésta no se permite "bajo ningún concepto". Es una medida estricta que pretende establecer parámetros más seguros en la prevención de patógenos.
Los cambios y novedades en materia de legislación alimentaria están en continua evolución y actualización. Esta actividad normativa responde a la necesidad de tener que hacer frente a "nuevos retos en seguridad alimentaria", admite Karen Hulebak, presidenta de la Comisión del Codex Alimentarius. Se pretende proteger al consumidor y ofrecerle "alimentos inocuos", una tarea compleja que requiere la implicación de los numerosos sectores que forman parte de toda la cadena alimentaria. Una de las últimas necesidades, según apunta el Codex, es establecer límites máximos para melamina en alimentos y piensos, una sustancia que se usa en la industria en la fabricación de polímeros, como retardante de llama y también como fertilizante en algunos países, aunque no en la UE ni en Estados Unidos.
Otros riesgos que necesitan actualizar los límites considerados seguros son el Norovirus en productos frescos como marisco o alimentos listos para ser consumidos, aflatoxinas en frutos secos y fuminisinas en maíz y derivados. Los expertos ya trabajan en este aspecto. Su labor se centra en simplificar los controles y armonizar las normas en los distintos países.
Fuente: Consumer Eroski
Aporte: Claudia Villarroel
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ResponderBorrarTampoco se han pasado por alto otros problemas relacionados con la presencia de hidrocarburos policíclicos aromáticos en productos que se someten a procesos de ahumado y secado, y se ha analizado la leche en polvo destinada a bebés menores de seis meses. El centro de atención es el patógeno E. sakazakii, un microorganismo con acción contaminante que afecta sobre todo a los bebés prematuros y, en general, a los menores de seis meses con lactancia artificial. Su presencia suele estar asociada a una mala esterilización.
ResponderBorrarSe ven muy bien todas estas normas, pero seria bueno saber ¿Cuánto tiempo se tomara nuestro Gobierno y los legisladores para adoptar y actualizar las leyes existentes en Chile?, tampoco es la idea tomar una actitud pasiva reactiva, en la cual esperemos que otros nos digan que hacer, lo ideal sería que nosotros como país seamos capaces de llevar a cabo estudios científicos y así determinar que es lo más importante para nosotros.
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