Nitratos en los vegetales

Según estudio publicado la EFSA, el consumo recomendado de 400 gramos diarios de frutas y verduras, no sobrepasa la ingesta diaria admisible (IDA) de nitratos y asegura el efecto antioxidante y preventivo de los vegetales.

La EFSA ha pedido a la Comisión Europea un dictamen sobre los nitratos en hortalizas para poder determinar el equilibrio entre los beneficios y riesgos asociados a su consumo. Según resultados preliminares la ingesta de nitratos en la dieta no se asocia con un mayor riesgo de enfermedades, sin embargo, sus modificaciones a nitritos y óxido nítrico en el cuerpo humano, pueden tener relación con algunas enfermedades.

¿Cómo llegan los nitratos a los vegetales?
Una parte de los nitratos presentes en los vegetales se encuentra de manera natural, debido al ciclo del nitrógeno. Sin embargo, la concentración de esta sustancia puede aumentar debido a prácticas agrícolas inadecuadas, residuos industriales o la mala gestión de los residuos domésticos, los que contaminan las aguas que posteriormente absorben los vegetales. Asimismo se ha determinado que los vegetales cultivados en los países del norte de Europa tienen un mayor contenido en nitratos, ya que están expuestos a una menor radiación solar.

Principales fuentes de contaminación con nitratos
Las hortalizas representan más de la mitad de la ingesta total de estas sustancias, seguidas por las conservas de carne y el agua potable. Las hortalizas de hoja verde, tienen un contenido más elevado de nitratos que otras hortalizas o las frutas. Por este motivo es más importante el tipo de vegetal que se consume que la cantidad.

Hortalizas como lechugas y espinacas ya están sujetas a la normativa de la UE, por la cual se establece un contenido máximo de nitratos, aunque se calcula que el riesgo para su salud está asociado a un consumo excesivo de este tipo de alimentos (tanto en cantidad como en frecuencia).

¿Cómo reducir su presencia de nitratos en alimentos?
Eliminar hojas externas del vegetal ya que son más ricas en nitratos.
Consumir frutas y hortalizas frescas, así evitaremos la transformación de los nitratos a nitritos.
Evitar las hortalizas envasadas en plásticos. Los nitritos se desarrollan más rápidamente durante el almacenamiento.
Consumir productos de la agricultura ecológica, ya que estos no usan abonos químicos para su desarrollo.

Fuente: Consumaseguridad.com

Aporte: Araceli Terán.