Este alimento mejora la inmunidad natural y adquirida a través de la activación de las células sanguíneas NH y el incremento de la actividad fagocitante.
Científicos de la Universidad de Turku (Finlandia) determinaron que comer queso con probióticos puede ayudar a preservar y mejorar el sistema inmune de las personas mayores. Los resultados de este trabajo, publicado en "FEMS Immunology and Medical Microbiology", demostraron una clara mejora de la inmunidad natural y adquirida a través de la activación de las células sanguíneas NH y el incremento de la actividad fagocitante.
La mayor expectativa de vida de la población, crea la necesidad de buscar alternativas para retardar el deterioro del sistema inmune, explicó el autor principal de este estudio, Fandi Ibrahim. "La ingesta de bacterias probióticas mejora la respuesta inmune a través de otros productos y ahora hemos descubierto que el queso puede ser un portador de estas bacterias", aseguró.
Los autores del trabajo creen que la ingesta diaria de queso probiótico puede frenar el deterioro asociado a la edad del sistema inmune, conocido como inmunosenectud. Esto significa que el organismo es incapaz de matar a las células tumorales y que reduce la respuesta inmune a la vacunación y las infecciones. Las enfermedades infecciosas, los desórdenes inflamatorios crónicos y el cáncer son características asociadas a la inmunosenectud.
Para combatir este problema, los científicos se focalizaron en el tracto gastrointestinal, ya que constituye el principal punto de entrada para bacterias (a través de los alimentos). Por otra parte, es aquí donde se crea el 70% de las vitales células de inmunoglobulina. Los autores pidieron a un grupo de voluntarios entre 72 y 103 años, todos de la misma residencia, que comieran un trozo de placebo o una porción de queso gouda probiótico en el desayuno durante cuatro semanas. Después realizaron análisis de sangre para descubrir el efecto de las bacterias probióticas del queso sobre el sistema inmune.
El objetivo de esta prueba fue demostrar si las bacterias probióticas específicas del queso podían tener efectos beneficiosos sobre el sistema inmune de las personas participantes. "Hemos demostrado que la ingesta regular de queso probiótico puede mejorar el sistema inmune y su inclusión en la dieta mejora la respuesta inmune de los mayores a los cambios externos", concluyó Ibrahim.
Fuente: http://www.consumer.es/web/es/alimentacion/2010/05/18/193197.php
Aporte: María Gabriela Castro